Adicciones durante el embarazo
Antes que nada es importante advertir a los lectores sobre dos prejuicios igualmente perjudiciales, alentados por ciertas publicaciones poco serias que abordan, demasiado a la ligera, el tema de los medicamentos y adicciones en el embarazo.
El primero de ellos es el que indica que todos los males que suelen padecer normalmente las embarazadas, desde los vómitos y náuseas hasta la ansiedad o las subidas de peso, pueden ser eliminados por medicamentos más o menos milagrosos,que son bien difundidos por esos mismos medios masivos, publicidad mediante.
Debemos aclarar que la mayoría de estos trastornos del embarazo son habituales y, en cualquier caso, no es conveniente suministrar ninguna de estas drogas sin consultar previamente a un especialista.
Como influyen en la salud del bebe las adicciones durante el embarazo
Pero es preciso también considerar el prejuicio inverso, por el cual algunas embarazadas, advertidas por ciertos anuncios tremendistas que también parten muchas veces de la radio, la TV o las revistas, no quieren tomar ningún medicamento, aún los específicamente recetados por su médico.
Esta última tampoco es una buena práctica y puede causar problemas serios. Por ejemplo, la fiebre causada por una angina, una cistitis o una bronquitis, puede, según la edad gestacional en que ocurra, someter al embrión a temperaturas inadecuadas. Tenemos entonces que, si bien hay una gama de medicamentos que están contraindicados para las embarazadas (generalmente esta advertencia suele figurar, por una cuestión legal, en su prospecto) hay muchos otros que no ofrecen problemas.
Por eso es necesario que en cada caso se consulte al obstetra, quien evaluará la relación perjuicio-beneflcio que hay entre la toma del medicamento y el problema que supuestamente lo hace necesario.
El primero de ellos es el que indica que todos los males que suelen padecer normalmente las embarazadas, desde los vómitos y náuseas hasta la ansiedad o las subidas de peso, pueden ser eliminados por medicamentos más o menos milagrosos,que son bien difundidos por esos mismos medios masivos, publicidad mediante.
Debemos aclarar que la mayoría de estos trastornos del embarazo son habituales y, en cualquier caso, no es conveniente suministrar ninguna de estas drogas sin consultar previamente a un especialista.
Como influyen en la salud del bebe las adicciones durante el embarazo
Pero es preciso también considerar el prejuicio inverso, por el cual algunas embarazadas, advertidas por ciertos anuncios tremendistas que también parten muchas veces de la radio, la TV o las revistas, no quieren tomar ningún medicamento, aún los específicamente recetados por su médico.
Esta última tampoco es una buena práctica y puede causar problemas serios. Por ejemplo, la fiebre causada por una angina, una cistitis o una bronquitis, puede, según la edad gestacional en que ocurra, someter al embrión a temperaturas inadecuadas. Tenemos entonces que, si bien hay una gama de medicamentos que están contraindicados para las embarazadas (generalmente esta advertencia suele figurar, por una cuestión legal, en su prospecto) hay muchos otros que no ofrecen problemas.
Por eso es necesario que en cada caso se consulte al obstetra, quien evaluará la relación perjuicio-beneflcio que hay entre la toma del medicamento y el problema que supuestamente lo hace necesario.
